Es triste intentar algo con todas tus fuerzas y que todas tus fuerzas se queden en intentarlo

Muchas veces me dejo llevar por el impulso a ser mejor, a sentirme bien conmigo misma y a no dejarme patear por nadie más, jamás. Quizá la competición insana a la que juego me mata un poco pero me ha hecho falta mucha fuerza de voluntad para dar el paso y luchar por conseguir lo que tanto quiero dando todo lo que tengo y todo lo mejor de mi. Creo que no hay mayor fracaso que el de llegar a casa, mirarme al espejo y sentir que una vez más todo sigue igual, que nada ha cambiado en este aspecto y que parece ser que nunca lo hará. Intento visualizar para no rendirme, intento ser fuerte y decirme a mi misma que si los demás pueden yo podré mil veces más pero nunca es así, nunca llego tan lejos cómo las personas a las que odio, un día llegaron. No quiero rendirme aunque ahora mismo estoy deseando hacerlo. Quizá no sé lo que es ser valiente, quizá no sé lo que es ser resistente pero si hago todo esto es por mi y por callarte para siempre. Me gustaría poder verme con el corazón de aquellos que me odian y con los ojos de aquellos que me aman o viceversa, ver si el contraste de ambos es tan doloroso cómo lo que yo siento cada vez que lo intento y no puedo. 

1 comentario:

  1. Si una lo intenta mil veces, y cae otras mil, por pura terquedad terminará consiguiendo lo que se propone a la mil y una. No te desanimes.
    Suerte.

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