'A pesar de todo yo siempre te escogí a ti antes que a cualquiera.'

Hay días en los que pienso cuánto te quise y días en los que recuerdo cada mínimo detalle y siento la necesidad de recorrer medio mundo o tal vez, recorrerlo entero con el fin de encontrarte. He de decirte que si todavía ando buscándote es porque llevo una eternidad queriendo localizarte y por ese mismo detalle te he perdido para siempre, o tal vez por tu afán de hacerme padecer y obligarme a aguantar tus malas idas y venidas, tus sonrisas y tus miedos, la locura que se anteponía entre tu mundo y yo y la lujuria inalcanzable que era la de tus brazos alrededor de mi haciéndome tan segura como en la vida había estado. De nada sirve engañarme y decirme que no te echo de menos y que hace tiempo que no lo hago. El tiempo pasa y aún sigo creyendo en ese esperado día en el que me levante pensando que todo fue hace demasiado tiempo y que apenas tengo la capacidad de poder recordarte, pero imposible olvidarte. No quiero porque me hiciste feliz, fuera el día que fuera, yo sé que hubo un montón de ellos en lo que tu compañía me hizo sonreír más veces que llorar por el miserable corazón que demostrabas tener hacia lo que yo era entonces para ti, porque sé que ahora no queda nada de mi y ni lo espero, ni lo deseo, pero esto es tan triste que todavía me hace lamentarme y preguntarme un por qué que jamás tendrá ni lugar, ni respuesta. Ojalá y las cosas siguieran siendo tan sencillas cómo lo eran entonces, cuando un par de besos eran suficientes para tragarnos todas las inseguridades que se anteponían entre los dos, cuando aún querías vivir conmigo y yo quería vivir de ti. Te aseguro que lo hubiera dado todo y que a día de hoy, todavía me pregunto si estaría dispuesta a dar algo de mi por pequeño que fuese. Me marcaste y dejaste huella, quizá nadie te vio venir, pero es posible que muchos te vieran marcharte aunque únicamente fui yo la estúpida que te sentí desde el mismo sitio cada tarde allá dónde estuvieses. Ni te quiero de vuelta, ni te quiero decir adiós,  porque seamos sinceros, nunca estaré preparada para decirte que no me haces falta. 

2 comentarios:

  1. Precioso pero no te rayes mi niña

    ResponderEliminar
  2. "Ni te quiero de vuelta, ni te quiero decir adiós..."
    "...nunca estaré preparada para decirte que no me haces falta".
    Joder Eva, no son frases, son sentencias grabadas en piedra, mandamiento de una nueva religión.
    Me duele darte la enhorabuena por haberlas sentido, pero no por haberlas plasmado.
    Gracias

    ResponderEliminar