Nunca quise que tú te fueras.

Pensaba que os había encontrado, que eráis quien siempre había buscado, creía que eráis cuatro entre un millón y que decir de ti, pensaba que eras lo mejor de todo lo encontrado. Parecía imposible que yo, alguien tan complicado como la persona en la que me he convertido estuviera acompañada de tales personas y de tal tú, que fuiste, con diferencia y no por menospreciar el resto, el tesoro más grande que poseía en mi vida, amiga, tu eras todo lo que yo quería. Supongo que el tiempo va pasando y todos se van, ya no confío en que haya personas que un día vengan para no irse, porque nunca he contemplado la presencia duradera de alguien y lo peor, es que siempre se va quien yo más quiero y duele como no duele que se vayan los demás. Ya no es decir adiós, ni decir hasta nunca.. simplemente es no decir nada y observar cómo alguien se aleja hasta no estar, saber que por mucho que lo intente nunca volverá a ser lo mismo. Por suerte yo no estoy sola y me queda el consuelo de que tú tampoco, de que ninguna lo estaréis. Espero que ella te cuide y que si has encontrado un lugar en su corazón jamás encontrado en el mío te quedes muy dentro, estaré siempre, siempre esperando, siempre pendiente, siempre contigo. 

1 comentario:

  1. Creo que es una de las cosas mas difíciles, dejar ir a alguien que en su momento fue cercano, y la conocías como la palma de tu mano, pero ha cambiado, ya no es el mismo, y se aleja.
    Muy linda entrada :)
    Un beso enoooorme

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