¿Qué no hay mal que por bien no venga? Eso es mentira.


Ahí me tenéis en uno de esos días en los que las paredes se te echan encima, yo se que siempre hay salida, pero saber que todo irá mejor, no quita, que me sienta echa una porquería. Crecer es darse cuenta que la vida no es como quisieras que fuera. Responsabilidades, luchas, deberes...sonreír cuando no te apetece.Mentir para no hacer daño a las personas que quieres. He sido una cobarde disfrazada de valiente. Quizá la clave para ser realmente libre sea, reír cuando puedas y llorar cuando lo necesites.Se que no soy perfecta, bien, no me castigaré más por no serlo. Hoy busco, dormir a gusto. Aceptaré que tengo derecho a estar de bajón de vez en cuando...porque estar de bajón es humano.

No hay comentarios:

Publicar un comentario